A pesar de que tus pies sostienen tu cuerpo día a día, son los grandes olvidados. Y por ende, una de las patologías más comunes que pueden sufrir son las durezas en los pies.
Esta afección se presenta como el engrosamiento de la piel en zonas como talones o plantas, que pueden causar molestias e incluso dolor.
En este blog veremos cuáles son sus causas, los síntomas y cómo prevenirlos o tratarlos para mantener una pisada saludable y libre de molestias.
¿Qué son las durezas de los pies o callosidades y por qué aparecen?
Las durezas son un tipo de hiperqueratosis benigna que no suele causar dolor intenso, aunque a veces puede provocar molestia o irritación.
Suelen formarse en zonas de mayor roce como la planta, los talones o los dedos. Y es debido a algunos factores como:
- Roce y presión. Al usar un calzado inadecuado, al pisar incorrectamente o practicar actividad física intensa pueden generar fricción en la piel provocando estas durezas.
- Piel seca. Cuando falta hidratación en la piel es más posible que se produzcan esos engrosamientos.
- Problemas médicos. La diabetes o la psoriasis pueden aumentar la probabilidad de formar durezas.
- Envejecimiento. Con los años la piel tiende a volverse más gruesa y a perder elasticidad, lo que provoca un aumento de las callosidades.
- Peso. Las personas con sobrepeso u obesidad sufren mayor fricción en sus pies debido a la carga adicional.
- Caminar descalzo. Aunque pueda parecer contradictorio, la exposición directa de los pies al suelo puede generar fricción y presión.
¿Cómo podemos evitar las durezas y mejorar la salud de los pies?
Si eres propenso/a tener durezas en los pies, puedes seguir nuestras recomendaciones que como podólogos te ayudarán a mejorarlas e incluso llegar a evitarlas.
Consejos para evitar las durezas
- Cuidar tu calzado es esencial para prevenir la formación de callosidades, evita que causen presión excesiva en ciertas áreas y usa zapatos que se ajusten correctamente.
- Usa plantillas personalizadas para distribuir la presión de manera uniforme, así reduces la posibilidad de desarrollar durezas en áreas específicas.
- Mantén hidratados y cuidados tu pies con cremas diseñadas para suavizar la piel y prevenir la acumulación de callosidades.
- Consulta tu podólogo regularmente para evaluar la salud podal, identificar posibles problemas y recibir orientación personalizada.
Recomendaciones para eliminar las durezas en los pies
- Realizar visitas a tu podólogo periódicamente, es la forma más efectiva de eliminar las callosidades de forma eficaz y sin causar molestias.
- Exfolia tus pies como una rutina de cuidado común, antes de hidratar.
- Aplica crema hidratante. Recomendamos sobre todo las cremas que llevan un alto porcentaje en urea.
- Utiliza limas de uso podológico para eliminar gradualmente las capas de piel endurecida y facilitando el tratamiento de las durezas
- Sumerge tus pies en agua tibia con sales para ablandar la piel, posteriormente usa una piedra pómez suavemente para eliminar las capas de piel endurecida y termina aplicando con un masaje crema hidratante específica.
- Considera usar plantillas ortopédicas para ayudar a corregir los posibles desequilibrios en la pisada y disminuir la presión en áreas propensas a las durezas.
¿Cuándo deberías ir a una clínica podológica?
En principio, los callos no deberían provocarte dolor intenso, pero si notas más molestias de la cuenta o un cambio en la apariencia de los pies, es el momento de pedir una cita. Ignorar las durezas puede llevar a lesiones más graves y afectar a tu calidad de vida. En nuestra clínica, estamos comprometidos a brindarte el mejor cuidado podológico, ayudándote a mantener tus pies saludables y libres de molestias.